Díaz Diseño

Diseño Conceptual

Cómo entender el proceso creativo.

Diseñar es un acto interpretativo; da un valor gráfico a una idea, un deseo o un sueño, esto no es un proceso azaroso si no que es una metódica forma de entender las necesidades del cliente. Es preciso observar, conocer y analizar para entender la idea, luego se sintetiza en un concepto que deriva en una expresión gráfica coherente.

Todo diseño encierra un concepto. Para develarlo se precisa un método que garantice un proceso creativo eficiente y el resultado esperado.

Con este ejercicio, el diseño queda con propósito en su concepción creativa. Entender la experiencia total consigue convertir ese concepto en una idea gráfica. Se arrima a interpretar nuevas y desafiantes formas de modo de proponer una solución gráfica acorde al cliente. Se convierte, en definitiva, en un producto del análisis y no de la fortuna.

Diseñando la Naturaleza

Propósito estético y la Influencia Fibonacci

Una de las materias aprendidas en la experiencia de diseñar tantos años, es que existe un patrón estético aportando belleza y proporcionalidad a la pieza gráfica o marca.

Esta secuencia ordenada de números descrita por Leonardo de Pisa, matemático italiano del siglo XII, que describe, matemáticamente, la proporción áurea. Un canon que podemos descubrir en la naturaleza con mucha frecuencia.

Esta forma estética de trabajar no es nueva: marcas como Apple, Pepsi, Nike, Toyota, Adidas o National Geographic están basadas en ello. El diseñar con proporción áurea garantiza una estética armónica. Ello combinado con la fuerza interpretativa del lenguaje visual dan como resultado una marca potente y de muy fácil retención.